Menú Cerrar

HISTORIA

Vinieron a esta ciudad de Pando allá por el año 1888, en los primeros días del mes de Febrero, debido a empeñosos trabajos del entonces Cura Párroco de feliz recordación Don Juan Ignacio Bimbolino; celoso y ejemplar apóstol de la Causa católica; instalándose de inmediato en el colegio que se denominó Nuestra Señora del Huerto.

Las familias principales de la población le dispensaron su protección enviando sus hijas a recibir sólida instrucción y educación cristiana y año tras año fueron aumentando su prestigio, hasta colocar éste colegio en la categoría de uno de esmerada educación acompañada de conocimientos prácticos en todas las ramas del saber, que han venido formando una generación, orgullo hoy de ésta culta sociedad en cuyos hogares resplandecen las virtudes de una perfecta enseñanza. Sr. Nicasio Iturria, residente en Pando y presente en estos acontecimientos escribió así 40 años después: “…se supo a última hora… que llegarían en el tren de la mañana… Fueron acompañadas a la Parroquia, donde se hizo oraciones y cánticos. De aquí, fueron llevadas al Colegio.

Al día siguiente, domingo; se anunció que a las 3 de la tarde se inaugurarían los salones. Bastó, sólo este aviso…y se llenó de gente…” (Archivo de la Cdad. Hnas. de Pando) Una anciana de 105 años, al ser entrevistada en 1976 expresaba: “Yo tenía 17 años, cuando llegaron las Hnas. en tren, llovía mucho y las calles estaban llenas de barro. A las cuatro Hnas. las subieron a un carruaje. Nosotras las acompañábamos a pie, todas embarradas; pero estábamos muy contentas. Nos enseñaron muchas cosas: Catecismo, bordado, de todo…” En la inauguración del Colegio el Pbro. Juan Ignacio Bimbolino dijo: “Esta sencilla ceremonia tiene un alto significado, por cuanto, por ella, se manifiesta que, con la invocación del nombre de Dios, se puso la piedra angular, a este edificio. Piedra, que es rechazada y menospreciada por tantos sistemas modernos de educación…”

Este sacerdote guardaba en su corazón, el recuerdo de aquellas “madres italianas”, que lo acunaron, al quedar huérfano, en la epidemia de fiebre amarilla de 1857. Llegó al Hospital, como tantos niños encontrados abandonados, cuyos antecedentes familiares se desconocían. Una religiosa al recibirlo en sus brazos exclamó ¡Qué bimbo! ¡Qué bimbolino! (¡Qué niño! ¡Qué bello niño!) Y así, se le comenzó a llamar. En la pila Bautismal se le llamó Juan Ignacio. Hoy el Colegio es mixto y con un buen número de alumnado, ha tenido grandes reformas. En 1958 se inaugura el nuevo edificio y comienza el Liceo. Hoy Pando es una Ciudad unida a Montevideo por una doble ruta, poblada en los 30 km. que las separa. 135 años al servicio de la formación integral de niños y jóvenes, célula básica sobre la que se construye la familia, muestran nuestra trayectoria educativa: Calidad, Eficiencia, Atención personalizada y tecnología actualizada…